Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas de febrero, 2016

Un mar llamado OLVIDO

        Imagen: Google. Con manos frías y un tanto pálidas rebuscó dentro de aquel corazón lleno de telarañas y en la pared, bastante manchada y oxidada por las lágrimas, encontró colgada la foto de una cara que ya empezaba a perder nitidez, la tomó con delicadeza y la miró por largo tiempo como queriendo personificar los recuerdos que evocaba. Después de un rato, con resignación y dolor recogió cada recuerdo de ella, cada migaja de su aliento, los ecos de sus palabras de amor, de las promesas que nunca se cumplieron, los pedazos de su risa, el color de su mirada, cada una de las huellas de sus labios, la suavidad de sus caricias y los besos esparcidos a lo largo de ese órgano casi extinto. Tomó todo eso y lo puso dentro de una caja de cartón, guardó un minuto de silencio mientras miraba hacia la ventana, tratando de encontrar la manera de decir adiós sin desangrar su vida; cuando por fin reunió el suficiente coraje, se puso

Así se pronuncia el amor

Sus miradas se cruzaron en una mañana de febrero, la vida misma se encargó de unir sus destinos utilizando como carnada una tímida sonrisa. Su cabello dorado fue lo primero que amó aún sin haberla conocido. Al cabo de unos meses, tras diarios encuentros, sus almas ya se pertenecían y de allí en adelante serían historia eterna. La primera vez que sostuvo su mano, sintió un alboroto monumental en su corazón, seguramente se asustó, porque reconoció la caricia del ser por el que de allí en adelante seguiría latiendo. El primer beso que se dieron, tuvo a los más hermosos testigos: las preciosas flores de color naranja de un jardín y un gatito de piel ceniza y ojos azules; tomó su cara entre sus manos y mirando fijamente sus labios, la besó… lo hizo con un sentimiento tan indescriptible, que la dulzura, la pasión y la ternura llegaron a sentir envidia. Después aparecieron los “te amo” y se manifestaron a punta de bolsas de regalo en las que ella le envolvía sus b